La Toxina Botulínica tipo A y los rellenos faciales como fillers de Ácido Hialurónico son dos productos distintos con fines distintos. A veces muchos pacientes preguntan ¿Cuál tratamiento es mejor? La respuesta varía de lo que se quiera tratar y muchas veces el paciente requiere la combinación de ambos, todo depende de las necesidades de cada quien. Aquí te contamos cinco diferencias entre cada uno de estos tratamientos rejuvenecedores.
1) La toxina botulínica se aplica en los músculos faciales que queremos relajar y el ácido hialurónico directamente en la arruga.
El ácido hialurónico funciona rellenando la arruga. Es el ácido hialurónico una sustancia natural que produce nuestro propio cuerpo y es totalmente biocompatible. La Toxina Botulínica tipo A, en cambio, es una proteína externa.

2) Zonas a tratar: La toxina botulínica se aplica en el tercio superior del rostro para tratar y prevenir las arrugas de expresión. Sus áreas de tratamiento son:
Arrugas frontales:
Estas arrugas son los surcos que se producen por la contracción del músculo frontal ubicado en la frente. Al aplicar en esta zona logramos eliminar la formación de las líneas de expresión de la frente, mejor conocidas como código de barras. El entrecejo se arruga por el movimiento del músculo corrugador y su corrección con toxina botulínica resulta muy estética y natural.
Arrugas periorbitarias:
Conocidas comúnmente como “patas de gallo”. Estas líneas de expresión se forman por la contracción del músculo orbicular de los ojos.
El ácido hialurónico se aplica más que todo en la zona media del rostro para dar volumen y suavizar líneas de expresión, especialmente en el área del surco nasogeniano o para aportar volumen en pómulos, más abajo les contamos otros usos. Le explicamos en detalle sus usos:
Labios: volumen, contorno y comisura.
Pómulos: volumen facial.
Alrededor de la boca: arrugas labiales o peribucales.
Surcos nasogenianos: líneas de expresión de ambos lados de la nariz hacia la boca.
Patas de gallo: arrugas perioculares externas.
Entrecejo y frente.
3) Duración del efecto: El efecto de relajamiento del musculo facial con la aplicación de la toxina botulínica tipo A dura unos 5 meses y efecto del tratamiento con fillers de Ácido Hialurónico puede durar hasta un año. La toxina botulínica además de relajar previene la aparición de nuevas arrugas, y el ácido hialurónico deja ese aporte de volumen e hidratación rellenando surcos y líneas.

4) Otros usos: Cuando alguien padece de hiperhidrosis, (sudoración excesiva), es posible recurrir a la toxina botulínica para disminuirla drásticamente. Casi siempre a personas con esta afección, se le aplica en axilas, manos y plantas de los pies. También es usada con fines médicos como Neuronox.
También hay varios tipos de ácido hialurónico, y cuando se inyectan, derivan en muchos subtipos. Hay algunos para hidratar, otros para labios, pómulos, mentón, ángulo mandibular. También usados para rinomodelación.
5) ¿Cómo es la aplicación? El tratamiento con Toxina Botulínica tipo A es sencillo, rápido y prácticamente es indoloro, no es necesario aplicar anestesia local. En el ácido hialurónico se aplica anestesia tópica o local para adormecer el área.
Durante el proceso, se refiere un dolor muy leve según la sensibilidad del paciente. El tratamiento se lleva a cabo con una aguja fina o mediante una cánula en la dermis a lo largo del borde del área del tratamiento.
Ambos tratamientos mínimamente invasivos le ayudarán a cuidar su piel y regresar el paso del tiempo, lo importante es acudir a un médico especialista quien le realizará una evaluación y le indicará qué es lo mejor según sus necesidades.
Siempre es importante conocer qué producto se aplicará, de qué casa comercial, garantías y registros sanitarios. En Sofimedical garantizamos los mejores productos, respetando todos los protocolos. En cuanto a Toxina Botulínica tipo A, tenemos dispobinle Maxitox y Neuronox y en ácido Hialurónico, contamos con los fillers de Reyoungel, de Bioha Laboratorios, y con Restylane de Galderma.